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CONSECUENCIAS DE LA PROTECCIÓN EN RESERVAS MARINAS EN ILLES BALEARS.

A través del histórico de nuestros artículos se puede entrever nuestra filosofía en relación con los recursos pesqueros y como potenciar los beneficios económicos derivados de la pesca profesional de artes menores y del turismo asociado a los espacios que visibilizan salud ambiental, en un esfuerzo coherente, necesario y posible de compatibilidad.

 

En este sentido hemos defendido la necesidad de mantener y crear nuevas reservas integrales de pesca y otras figuras de protección estricta de enclaves calientes de nuestra biodiversidad marina.

 

Pero no solo son las más o menos grandioelocuentes declaraciones institucionales de zonas protegidas, están deben ir acompañadas de una partida presupuestaria tanto de vigilancia como de investigación prolongada en el tiempo y de un esfuerzo de coordinación entre los diferentes actores institucionales que tienen competencia. En el caso de las reservas marinas los servicios de inspección pesquera del Gobierno de las Islas Baleares, que en muchas ocasiones no tienen ni embarcaciones, los agentes de medio ambiente y los inspectores de pesca del Estado.

 

También hemos defendido la tesis que el gasto presupuestario en vigilancia y en investigación, es en realidad una inversión con un retorno de intereses rápido y visible en forma de nuevos recursos pesqueros-comerciales y turísticos, además de contribuir a una mejora sustancial de las condiciones ambientales.

 

Ahora investigadores de la empresa pública Tragsatec, del Centro Oceanográfico de Baleares del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y la Dirección General de Medi Rural i Marí del Govern de Islas Baleares han publicado un trabajo científico sobre el seguimiento de los recursos pesqueros realizado en las reservas marinas de Baleares y su aplicación a la gestión del litoral.

 

Este estudio se basa en un modelo de análisis pormenorizado con más de 20 variables ambientales, de presión pesquera en los alrededores de las reservas y de aporte de juveniles-reclutamiento. Como zona de testeo de a acudido a dos que gozan de la máxima protección, el Parque Nacional de Cabrera y de la Reserva Marina del Migjorn, comprobándose su alta capacidad predictiva.

 

Este modelo muestra que solo el 15% del litoral abierto a la pesca se encuentra en buenas condiciones de conservación, el 46% se encuentra dentro de los márgenes de sostenibilidad aunque plenamente explotado y el 39% restante muy sobreexplotado.

 

El estudio expresa que la buena gestión que se realizó entre 2000 y 2011 en las reservas marinas de Balears permitió recuperar la ictiofauna y desarrollar este estudio y asegurar que el modelo desarrollado permite y permitirá nuevas aplicaciones considerando la máxima protección, la interacción de corrientes con la complejidad estructural del fondo y la conectividad con aguas profundas, produce un modelo válido de variación de la biomasa de peces.

 

Concluye, el estudio, que la biomasa original se ha multiplicado por tres en tan solo cinco años de protección de las reservas marinas integrales.

 

Redacción Marcabrera